La diabetes mellitus es el principal problema de salud que afecta a la población mexicana y es más importante en el contexto de la población derechohabiente del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Las tasas de mortalidad se han duplicado de 1990 a 2005 en todo el país y en algunas regiones más rápido que en otras. Los hombres no derechohabientes del IMSS son los que presentan las tasas más bajas. La mortalidad indica que la carga de las enfermedades crónicas no es exclusiva de las regiones más desarrolladas, pues el ritmo de incremento de la mortalidad por diabetes mellitus en Chiapas, Oaxaca y Guerrero es mayor que en otras regiones del norte y traduce que el problema está creciendo más en las regiones pobres del país. Las intervenciones realizadas por las diferentes instituciones de salud deberán impactar en el mediano plazo en las tasas de mortalidad, pero también en el ritmo de crecimiento de la mortalidad en las diversas regiones.