Cómo citar este artículo: Fajardo-Dolci G. Renovar la mística en el Instituto Mexicano del Seguro Social. Rev Med Inst Mex Seguro Soc. 2015;53(2):126-8.
EDITORIALES
Recibido: 15/01/2015
Aceptado: 30/01/2015
Germán Fajardo-Dolci*
*Titular de la Unidad de Educación, Investigación y Políticas de Salud. Dirección de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social
Comunicación con: Germán Fajardo-Dolci
Teléfono: 01 (55) 5761 0704
Correo elctrónico: fajardo.german@gmail.com
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) es la primera institución de seguridad social en el país y ha sido pionero en América Latina en la organización integral de la atención médica. Este y muchos otros logros han sido posibles gracias a la preparación y desempeño de su personal, su profesionalismo, sentido humanitario, compromiso con la institución y solidaridad con la población. Así, el IMSS está preparado para enfrentar no solo el presente, sino también el futuro y para anticipar lo que más conviene a la institución y a su población asegurada.
Palabras clave: Seguridad Social, Mística de trabajo, Eficiencia organizacional
The Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) is the main institution of social security in México and has been a pioneer in Latin America in the comprehensive organization of medical atenttion. This and many other achievements have been possible due to the preparation and performance of its staff, their professionalism, humanitarian sense, commitment to the institution and solidarity with the population. Today, the IMSS is ready to face not only the present but also the future and anticipate what is best for the institution and its insured population.
Keywords: Social Security, Work philosophy, Efficiency organizational
El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) es la primera institución de seguridad social creada en el país y a lo largo de sus más de 70 años de vida institucional, ha sido un pilar fundamental para construir el Sistema Nacional de Seguridad Social con el fin de lograr una población más saludable y con mejor calidad de vida.
El IMSS, fundado en 1943, es resultado de los sueños, aspiraciones y esfuerzo colectivo de varias generaciones de mexicanos para enfrentar con mayor seguridad los riesgos de enfermedad, discapacidad y retiro.1 En materia de asistencia médica es la institución nacional con mayor cobertura efectiva al atender a la mitad de la población nacional.2A través de los miles de trabajadores institucionales de las ramas médica y paramédica, entre los que se encuentra el personal dedicado a la educación e investigación, ha contribuido con muchos logros significativos para la medicina nacional e internacional.3-5
En su inicio, el IMSS fue pionero en materia de organización y gestión de los servicios sanitarios, desarrollando un modelo innovador de atención médica que incluía todas las edades y toda la familia. Como parte de ese modelo, en 1955 implantó el Sistema Médico Familiar como base de la atención médica y que inicialmente operaba con médicos generales que atendían a menores de edad y otros que atendían a adultos, pero que evolucionó para transformarse en 1975 en una práctica profesional integral, que se consolidó con la incorporación de los primeros egresados de la Especialidad de Medicina Familiar creada en 1971.
La gestión efectuada por quienes en esa época dirigían la Jefatura de Enseñanza e Investigación permitió que en 1974 esta especialidad obtuviera el reconocimiento académico de la Universidad Nacional Autónoma de México, lo que estimuló a varios países de América Latina a enviar a sus profesionales a cursar en el IMSS dicha especialidad.
El tiempo y la historia permiten valorar hoy en día que la creación del Sistema Médico Familiar, fue la primera respuesta estructurada, anticipada y visionaria del Sistema Nacional de Salud, para aplicar en México el enfoque de atención integral que años más tarde se acordó en la Reunión Internacional de Alma Ata sobre Atención Primaria de Salud, promovida por la Organización Mundial de la Salud en 1978.6
En el ámbito hospitalario, el IMSS también ha sido pionero en América Latina en la organización integral de la atención médica, creando los primeros centros médicos que conjuntaban diversos hospitales de especialidades en un solo espacio físico. El Centro Médico “La Raza” fundado en 1952 y el Centro Médico Nacional creado en 1963, han sido la incubadora de grandes proyectos de atención médica, de educación e investigación, así como testigos por más de cinco décadas de los avances y transformaciones de la medicina institucional mexicana, como el del primer trasplante renal en adulto de donador vivo en 1961 cuya sobrevida fue de 22 años.
La lista de éxitos en la atención médica hospitalaria es muy extensa y al anterior debemos agregar la realización del primer reimplante de mano en 1967, el primer trasplante renal en un infante en 1985, los primeros trasplantes satisfactorios de corazón en 1988 y de hígado en 1989, los primeros trasplantes de medula ósea y de hígado en niño en 1989 y 1993, así como la primera separación integral orgánica de siameses en el 2004.
Pero los éxitos de la medicina institucional del IMSS no se circunscriben al ámbito de la medicina curativa, por el contrario, la creatividad de los sanitaristas institucionales los han ampliado al campo de la medicina preventiva para conseguir mayor impacto en la salud pública nacional y en la población asegurada.
Hoy los trabajadores del IMSS estamos orgullosos de que diversas instituciones del Sistema Nacional de Salud hayan adoptado los objetivos, estrategias y acciones de la integración de programas de salud PREVENIMSS, implantada en 2004 y cuya actual campaña “Chécate, Mídete, Muévete”, la ha venido a revitalizar.7
La consistente labor de la institución y sus trabajadores, así como la credibilidad obtenida en la administración pública y la sociedad mexicana, hicieron que en 1974 el Gobierno Federal le confiara la administración de un programa para atender la salud de la población rural en condición de pobreza y marginación, inicialmente bajo la denominación de IMSSCOPLAMAR y cuyo nombre actual es el de IMSSPROSPERA.
Los habitantes de las zonas rurales y algunas áreas urbanas de menor desarrollo del país han recibido por cuatro décadas los beneficios de este programa, el cual ha contribuido a cambiar el rostro de esas comunidades, pero sobre todo, las condiciones de vida de sus habitantes.8,9
Estos y muchos otros logros han sido posibles gracias a la preparación y desempeño de su personal, su profesionalismo, sentido humanitario, compromiso con la institución y solidaridad con la población. Ser empleado de esta institución es una gran distinción y no es infrecuente escuchar de sus trabajadores expresiones como “tengo la sangre verde”, “tengo el águila tatuada en el corazón”, “orgullosamente soy del IMSS”. Estas expresiones son simbólicas y traducen la mística de los trabajadores así como su sentido de pertenencia con una familia institucional. Reflejan por otra parte la reciprocidad de los trabajadores hacia una institución que hoy ofrece condiciones de un trabajo digno y que inclina el fiel de la balanza hacia la solidaridad, la equidad social y el desarrollo del país.
Desde que entró en funciones el IMSS, su personal ha sido sin duda el motor que mueve exitosamente la maquinaria de la seguridad social y pese a las dificultades que ha enfrentado, como el del terremoto de septiembre de 1985 que afectó la funcionalidad de varias de las unidades médicas, ha puesto siempre su mejor esfuerzo y actitud solidaria para atender a la población enferma.
Para la institución, todos sus trabajadores son importantes: los que laboran en oficinas centrales diseñando las políticas, estrategias y programas institucionales; los que trabajan de las oficinas delegacionales aplicando esas directrices y garantizando la operación de los programas institucionales; pero de manera particular, el personal médico y paramédico que labora en las unidades médicas de los tres niveles de atención, cuyo desempeño es invaluable debido a que son ellos quienes atienden con solidaridad, ética y humanismo las necesidades de la población que acude en busca de atención, de consuelo a sus dolencias y con la esperanza de conservar, mejorar y recuperar su salud.
La actitud solidaria y el comportamiento ético solo son posibles en profesionales dotados de un pensamiento humanitario y el personal médico del IMSS reúne esa cualidad, lo que le permite transitar por los caminos ásperos de la perfección, que llevan al hombre a entender que su preocupación máxima debe ser el hombre mismo, para estudiarlo y comprenderlo, con todo lo que ello implica en interés y respeto por su vida.10
Si bien la realidad indica que hoy enfrentamos un difícil panorama que amenaza el equilibrio entre la oferta y demanda de los servicios de salud, debido a la situación financiera derivada de condiciones macroeconómicas que afectan la economía nacional, las dificultades que enfrentaron quienes nos antecedieron no fueron menos complejas, pero ellos las superaron con entereza, pasión, vocación y “amor a la camiseta”. Este es el momento que nos toca vivir y tenemos que enfrentar los retos como la familia que somos, probando una vez más nuestra capacidad de innovar en situaciones difíciles y de trabajar en equipo para encontrar nuevas soluciones a viejos problemas.
Desde la tribuna que ofrece esta revista, que inició en 1962 y se ha mantenido en forma ininterrumpida por más de cinco décadas,11 nos sumamos al esfuerzo institucional y de sus directivos para seguir promoviendo los valores que mantienen y alientan nuestra cultura organizacional, especialmente los de solidaridad, equidad y ética, buscando siempre el beneficio de la población asegurada.
El IMSS está preparado para enfrentar no solo el presente, sino también el futuro y para anticipar lo que más conviene a la institución y a su población asegurada. Sin duda estará mejor preparado a medida que su personal continúe generando conocimiento a través de la investigación y diseminándolo mediante procesos educativos como siempre lo ha hecho. Contamos con el recurso humano necesario para seguir siendo líderes en la atención a la salud en Latino América; tenemos investigadores de todo tipo: clínicos, biomédicos, en salud pública, en economía y en administración de servicios de salud. También tenemos personal formado y con gran experiencia en docencia, para todos los niveles: pregrado, prácticas profesionales, especialidades médicas, posgrados en otras disciplinas, maestrías y doctorados. Contamos con personal experto en todas las ramas de la medicina y personal paramédico en todas las áreas, que nos permite prevenir y detectar oportunamente enfermedades, ofrecer servicios de apoyo, servicios curativos y de rehabilitación.
Sigamos trabajando juntos, reforcemos la mística y el orgullo de pertenecer al IMSS para seguir enfrentando los retos del futuro.
Declaración de conflicto de interés: el autore completó y envió la forma traducida al español de la declaración de conflictos potenciales de interés del Comité Internacional de Editores de Revistas Médicas, y no fue reportado alguno que tuviera relación con este artículo.