Lo que debe conocerse de la gasometría durante la guardia
Resumen
La gasometría es la medición de los gases disueltos en la sangre, que se realiza mediante la cuantificación de pH, presión de dióxido de carbono (pCO2), bicarbonato sérico (HCO3–), lactato y electrólitos séricos: sodio (Na), potasio (K) y cloro (Cl). Es útil para llevar a cabo un diagnóstico, complementar la etiología y establecer tratamiento en el paciente críticamente enfermo. En este texto se establece una ruta diagnóstica a partir de cinco pasos para la interpretación de las gasometrías: 1. Definir si se trata de acidemia o acidosis, o de alcalemia o alcalosis. 2. Interpretar el componente metabólico o respiratorio. 3. Calcular la brecha aniónica; niveles por arriba de 15 ± 2 indican otras probables causas de exceso de aniones (metanol, uremia, cetoacidosis diabética, paraldehído, isoniazida, acidosis láctica, etilenglicol y salicilatos). 4. Estimar la compensación mediante las fórmulas de Winter. 5. Calcular el delta gap para definir si existe un problema intrínseco como alcalosis metabólica. Cuando la brecha aniónica es normal, se calcula la brecha aniónica urinaria: si el valor es negativo, la pérdida es extrarrenal; si es positivo, es de etiología renal.